La Xunta volvió ayer a pedir la transferencia de la AP-9 y que el Gobierno central homogeneice las tarifas de los peajes en el conjunto de España. La conselleira de Medio Ambiente, Ethel Vázquez, defiende que la AP-9 es una vía troncal que discurre completamente por el territorio gallego, y que la Xunta "puede garantizar con mejores condiciones" el servicio a los ciudadanos. El Ejecutivo de Feijóo quiere asumir la competencia sobre esta autopista, según la conselleira, para poner fin a las retenciones registradas a finales de mes.

El Ministerio de Fomento siempre se ha negado, pero Ehtel Vázquez "no pierde la esperanza" de hacerse con la gestión de este vial. La conselleira dijo ser "consciente" de que el departamento de Ana Pastor "está haciendo todo lo posible" para solucionar el colapso en la AP-9. Ha abierto una investigación, enviado inspectores y amenazado a Audasa con sanciones y retirarle la concesión. Por su parte, la Xunta ha dispuesto en la página web del Instituto Galego de Consumo un apartado para que los usuarios reclamen a Audasa con el objetivo de hacerlo más "competente".

La conselleira de Medio Ambiente firmó ayer con su antecesor en el cargo y ahora regidor de Santiago, Agustín Hernández, un convenio por 641.000 euros para obras de humanización de una calle. También presentó las ayudas para los ayuntamientos en Red Natura. Son 1,8 millones de euros para financiar actividades de preservación de ecosistemas, recuperación de elementos históricos patrimoniales y de especies y mejora del paisaje, entre otras.

Hernández también opinó sobre la situación de la autopista y denunció que Audasa, la empresa concesionaria, "demuestra cada día un desprecio a los gallegos", por lo que, ante "esa falta de sensibilidad" frente a los problemas de saturación de la AP-9, lo que se debe hacer es "aplaudir" que el Ministerio de Fomento "tome medidas". Al tratarse de una infraestructura de titularidad pública gestionada de forma privada considera que los problemas de gestión "son culpa de la empresa".