Nadie te persigue. Tu problema es mucho más grave: no existes.

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Quien hace algo que no vale nada no se puede permitir el lujo de parar.

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Los hombres de negocios negocian con los hombres.

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- ¿Qué piensas de la vida?

- Que la vida no piensa en mí.

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El infierno se inventó a imagen y semejanza del cielo. El engaño consiste en inculcarnos su antagonismo.

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Me apetece ir a un museo de cera para hablar con alguien.

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Tengo la edad de los paraguas.

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¿Acaso la vida es otra cosa que escuchar gritos en habitaciones contiguas?

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-         Al salir procuren dejarlo todo otra vez patas arriba. Acostumbro a entrar en casa haciendo el pino.