El Mapa del Ruido en A Coruña: estos son los barrios, los colegios y los centros sanitarios que sufren mayor contaminación acústica

El informe municipal concluye que bajaron los afectados respecto a hace siete años debido a la caída de los coches, a que Europa ha cambiado el modelo matemático para calcular la cifra y a “medidas correctivas del Concello”

Tráfico en Linares Rivas, en la entrada de la avenida de Alfonso Molina. |   // CARLOS PARDELLAS

Tráfico en Linares Rivas, en la entrada de la avenida de Alfonso Molina. | // CARLOS PARDELLAS

a. r. f. / j. m. g.

Un 22,5% de vecinos de A Coruña sufre una nivel de ruido por encima de lo recomendable, un 26% si se tienen en cuenta solo las horas nocturnas, donde los índices de las autoridades son más exigentes. A pesar de ser un alto porcentaje de población, el número es menor que el del último Mapa Estratéxico de Ruido elaborado por el Concello, de 2016 y que ahora se actualiza. La caída se debe, en parte, a que hay un 12% menos de tráfico que hace siete años, aunque la cifra está influida también por que las directivas europeas han modificado los métodos matemáticos de cálculo para que los resultados sea más precisos, lo que ha hecho desplomarse la estadística, según las conclusiones del documento municipal, que destaca también el efecto de las “acciones correctivas del Concello”. Entre las principales calles con mayor intensidad, además de las rondas y avenidas, están la Torre, Orillamar o Federico Tapia.

Las conclusiones del informe analizan el impacto de la contaminación acústica debido al tráfico viario, como principal foco de problemas, según las horas del día, ya que los niveles considerados aceptables por la UE —Objetivos de Calidad Acústica— varían. Si se tienen en cuenta las 24 horas del día, el mapa de ruidos computa que hasta 55.200 personas sufren mediciones sobre lo recomendable (por encima de los 65 decibelios ponderados o DBA, la unidad que se usa para medir la intensidad del sonido). Corresponde a un 22,5% de la población coruñesa. Entre ellas hay 15.000 que están en el rango más extremo, por encima de los 75 decibelios.

De noche, las directivas europeas consideran improcedente cualquier sonido por encima de los 55 DBA. Y en esa situación están hasta 64.000 personas, un 25,9% de la población coruñesa (mil vecinos por encima de los 70 DBA). En horario de tarde es un 11% y en horario diurno (computan doce horas) está el 18,4%.

El informe señala que, en el Mapa de Ruido anterior, se estimaba que hasta 173.000 ciudadanos estaban expuestos durante la noche a contaminación acústica, lo que supone una reducción del 63%, una disminución “muy notable” respecto al documento anterior. “Dicha variación está motivada por por el cambio en el modelo matemático de predicción de cálculo” y el conteo de la población, según una directiva europea de 2021. Este cambio de “normativa aplicable” ha influido “en una mejor evaluación de la exposición sonora y en la reducción aparente de la población afectada”.

“En segundo lugar, hay que destacar”, prosiguen las conclusiones del texto, “la reducción global del tráfico rodado dentro del municipio en torno al 12%, lo cual redunda en una reducción de la población expuesta”. En tercer lugar, el informe que existen “acciones correctivas del Ayuntamiento”, incluidas en el “Plan de Acción Contra el Ruido” con “medidas para reducir la comunicación acústica”.

La alcaldesa Inés Rey, explicó que hace casi veinte años se analizan los impactos del ruido y apuntó como causas del descenso “las políticas de movilidad sostenible que ya se estaban implantando antes de la pandemia y que, tras la crisis sanitaria, recibieron un impulso más marcado”. Enumeró entre las acciones, la ampliación de los carriles bici y la expansión de BiciCoruña, la implantación de la Zona de Bajas Emisiones y “el apoyo al uso del transporte público”.

Entre las principales vías con mayor afección acústica se encuentran ronda de Outeiro, ronda de Nelle, avenida de Oza, avenida de Fisterra, avenida de Arteixo, calle Orzán, calle de la Torre, calle Orillamar y la zona del Ensanche, con las calles Federico Tapia, Juan Flórez y Ciudad de Lugo, entre otras. Estas vías, avanza el informe, “serán objeto de estudio de detalle” en el futuro plan de acción contra el ruido, que actualizará el que está en vigor.

El Mapa del Ruido de A Coruña estará expuesto en información pública durante un mes, en la web y en la Casa del Agua. “La diagnosis servirá para seguir tomando medidas para reducir el ruido y para hacer que la ciudad siga ganando calidad de vida”, avanzó Rey.

Eusebio da Guarda, Fernando Wirtz, Materno y Chuac, los más ‘ruidosos’

Uno de los aspectos que analiza el Mapa Estratégico de Ruido de A Coruña es el de los denominados “edificios de uso sensible” que están expuestos a un mayor volumen sonoro. En esta categoría se incluyen los centros educativos y sanitarios de la ciudad y para determinar el impacto del ruido se analiza tanto el generado por el tráfico rodado como el generado por el ferrocarril y las zonas industriales de la ciudad.

Los datos contenidos en el documento revela que los centros que soportan un mayor ruido total son el instituto Fernando Wirtz —situado al pie de Alfonso Molina—, el colegio y el instituto Eusebio da Guarda —encajados entre la plaza de Pontevedra y la avenida Barrié de la Maza—, la Casa del Mar —entre la avenida del Ejército y Ramón y Cajal—, el centro de salud de Elviña —junto a Alfonso Molina—, el Chuac y el Materno Infantil —al borde de la avenida de A Pasaxe—, el hospital Quirónsalud y la residencia de mayores Bellolar —ambos próximos a Alfonso Molina—, ya que en todos ellos se superan los 75 decibelios.

Por encima de los 65 decibelios se sitúan numerosas instalaciones de este tipo en la ciudad, como los colegios Concepción Arenal, San Francisco Javier, Wenceslao Fernández Flórez, Sagrada Familia, Peñarredonda, Eirís, Labaca, Santo Domingo, Salesianos, Grande Obra, Esclavas, Zalaeta, Cornide Saavedra, Santa María del Mar y Compañía de María. También las escuelas infantiles Arela y As Mariñas, todo el campus de Elviña, las Escuela de Náutica y Arquitectura, la Facultad de Ciencias, además de siete centros sanitarios, entre ellos los hospitales Abente y Lago y San Rafael.

El distrito que engloba Os Castros, Elviña y O Castrillón es el más afectado

El paso de los dos principales accesos a la ciudad —las avenidas de Alfonso Molina y A Pasaxe, además de las de San Cristóbal, Oza y el Ejército— hace del distrito 7 de A Coruña el que soporta un mayor ruido total. En los barrios As Rañas, O Martinete, San Cristóbal das Viñas, O Birloque, Someso, Ponte da Pedra, Lonzas, Matogrande, Monelos, O Castrillón, A Cubela y Os Castros se contabilizan 849 personas que padecen de forma global más de 75 decibelios y 19.400 que lo hacen entre los 55 y los 59. Aunque de noche no se registra ninguna persona que alcance los 70 decibelios, hay 1.133 que sufren ruido con un nivel entre los 65 y los 69.

El distrito 3 —conformado por el Ensanche y Cuatro Caminos y el que se incluyen Juan Flórez, la parte baja de la avenida de Fisterra, parte de ronda de Nelle, Fernández Latorre, A Palloza, parte de avenida de Oza, ramón y Cajal y parte de avenida del Ejército— es el segundo en cuanto al impacto del ruido en sus habitantes, ya que son 444 las personas que escuchan sonidos por encima de los 75 decibelios de forma habitual. Por la noche, son 954 los residentes que se ven obligados a escuchar ruido de entre 65 y 69 decibelios. La ubicación en esta zona de la ciudad de algunas de las vías de comunicación más transitadas contribuye a generar estas molestias.

As Xubias, A Pasaxe, Santa Gema, Palavea, Eirís, Casablanca, Curramontes, Lamadosa y Pedralonga, que forman el distrito 8, son el tercer distrito con más afectados por el ruido, con 162 vecinos de forma global por encima de los 75 decibelios y con 16 entre los 65 y 69 por la noche. Los distritos 1, 2, 5 y 6 no tienen ningún afectado por más de 75 decibelios.