El Puerto propone reforzar algunas actividades de los muelles y que sean compatibles con su transformación

El PSOE anima a fijar “un calendario” para la reordenación y el BNG avisa que la deuda “no puede condicionar” este proceso

Lage, Jorquera, Fernández Prado y Lorenzo, ayer. |   // LOC

Lage, Jorquera, Fernández Prado y Lorenzo, ayer. | // LOC

A. c.

La Autoridad Portuaria pretende que dentro de la transformación de la fachada marítima se blinde el puerto “como motor económico”, para lo que es necesario, según su presidente, Martín Fernández Prado, que se refuercen algunas actividades de los muelles interiores y que estas puedan ser compatibles con la reordenación.

El Puerto ha sido el primer invitado a la comisión municipal de la fachada marítima, que se celebró ayer, y en la que están presentes PSOE, PP y BNG. Fernández Prado, que espera que el proceso de reordenación de los muelles se haga con “diálogo, transparencia y la máxima participación de la sociedad”, recordó que este es el “proyecto que definirá la ciudad del siglo XXI”. “Del mismo modo que A Coruña quiere tener una gran universidad o un gran hospital, A Coruña quiere tener un gran puerto”, manifestó para avanzar que la Autoridad Portuaria está elaborando un Plan Estratégico 2024-2027 en el que uno de los objetivos es “definir las actividades portuarias que permanecerán en los muelles urbanos”. El mensaje es claro: no todo se va a trasladar a punta Langosteira. Aunque reconoce que la construcción del puerto exterior hace más de una década permite ahora “hablar de reordenar los espacios del puerto interior”.

“El puerto es uno de los grandes motores económicos de A Coruña y no puede perder potencial ni dejar de atender a las oportunidades de nuevas actividades que se puedan presentar”, indicó Fernández Prado.

Una visión que también comparte el BNG. Francisco Jorquera, presidente de esta comisión, defendió la necesidad de “definir un plan de usos portuarios presentes y futuros para tenerlo en cuenta a la hora de diseñar la nueva fachada marítima”. A los nacionalistas también les preocupa la deuda que tiene el Puerto por la construcción de punta Langosteira: “no puede condicionar el diseño de la fachada marítima ni dar paso a tentaciones especulativas con los terrenos que se queden liberados de usos productivos”. El Puerto también quiere que estos cambios sean “compatibles con la búsqueda de una solución a la deuda”.

El primer teniente de alcaldesa, José Manuel Lage, avanzó que en julio se conformará la comisión en la que están presentes las administraciones implicadas —Xunta, Concello, Puerto y Estado—. Así, comentó, el siguiente reto es marcar “un calendario que fije las diferentes etapas, donde también habrá un espacio importante para implicar al conjunto de la sociedad civil coruñesa a la hora de determinar la nueva fachada marítima y la integración de los terrenos portuarios en la ciudad”.

La Autoridad Portuaria insistió en que esta es “una oportunidad de compensar las carencias de la ciudad, de mejorar la movilidad y de mejorar la relación puerto-ciudad”. Fernández Prado quiere que el puerto sea “pieza de referencia por su calidad urbana y ambiental, un ecobarrio sostenible”.