Deportivo

Idiakez, el líder que convence: “Es un defensor de los suyos”

Peñistas del Dépor halagan la figura de un técnico “humilde” que “creyó de verdad en la cantera”

“Se merece la oportunidad para el año y que no haya nervios a la primera de cambio”, añade José González

Imanol Idiakez salta al césped de Riazor durante la celebración del ascenso después del partido ante el Real Unión de Irún. |  // IMANOL IDIAKEZ

Imanol Idiakez salta al césped de Riazor durante la celebración del ascenso después del partido ante el Real Unión de Irún. | // IMANOL IDIAKEZ

Xane Silveira

Xane Silveira

Llegó en un mar de dudas “como un desconocido” tras la salida de Rubén de la Barrera. Se mantuvo en los meses de mayor turbulencia gracias a su conexión con el vestuario. Y se ganó a la grada en un 2024 repleto de victorias que terminó en el añorado ascenso. Imanol Idiakez es el arquitecto de una subida trabajada a fuego por un plantel que nunca dejó de creer, un técnico que supo resistir y una grada que fue la tercera pata de la combinación. Ahora, camino de Segunda División, sus aficionados esperan que la tranquilidad acompañe su futuro. “Ha hecho un buen año y ha habido mucha presencia de canteranos, a futuro, si va bien, tiene que seguir”, explica Carlos Carballal, vicepresidente de la Federación de peñas y miembro de Torcida da Cabaña (Carballo).

Imanol Idiakez ha grabado su nombre en la historia del Deportivo. Es el entrenador del 14º ascenso y, también, el hombre que ha devuelto la ilusión a la grada junto a un plantel que será recordado. “Él siempre habló de la afición, en los momentos malos pidió ayuda y la gente correspondió y él siempre ha sido agradecido. Puede tener sus defectos como entrenador, cada uno tiene su opinión, pero al final se lleva bien con la gente y es muy cercano”, describe Carballal. Bajo su punto de vista, esa cercanía se echaba de menos: “Veníamos de otros entrenadores que las declaraciones cada vez parecía que echaban más leña al fuego y con actitud que no parecía lógica. Con Borja ya hubo algún mal rollo o con Cano. Y este hombre, ninguna mala palabra. Siempre ha sido muy atento”.

Su personalidad ha empatado con la grada. Su naturalidad y humildad casan con la ciudad en la que nadie es forastero. “Se ve y se nota es que es un tipo de los suyos. Defensor de los suyos. El otro día me gustó muchísimo cuando al salir Mercedes Cernadas (directora de comunicación), el tipo salió y lo primero que mostró fue respeto hacia ella. Es una persona agradecida. Es sencillo, y eso a la gente le gusta”, explica Jorge Fernández, presidente de la Peña Verín, quien cree que había una “tendencia a devorar entrenadores” que se ha frenado. “Consiguió hacer un buen grupo y eso se nota en las celebraciones. Hay mucha unión en el vestuario y eso es muy importante, siempre ha tenido el apoyo de los jugadores”, añade Fernández.

Más allá del éxito a nivel de gestión de plantilla, tanto ambos presidentes como el peñista José González, de Al Sur de Riazor, considera que hacía falta una personalidad normal y sin estridencias: “Nunca ha tenido una palabra más alta que otra, siempre con respeto y cariño, con ganas de que esto vaya para adelante y eso la gente lo aprecia”.

"Nunca ha tenido una palabra más alta que otra, siempre con respeto y cariño, eso la gente lo aprecia"

José González

— Peña 'Al Sur de Riazor'

Pero no es lo que más destacan los peñistas blanquiazules. Por encima del vestuario y su personalidad, los tres coinciden y ensalzan su gestión de la cantera como el gran éxito en la etapa de Imanol Idiakez. Es el gran legado del entrenador easonense. “Fue el primero. De boquilla todos decían que iban a contar, pero él fue el primero en hacerlo. Apostó fuerte por juntar a Mella y Yeremay. Otros no los pusieron e Idiakez luchó hasta juntarlos”, destaca Jorge Fernández.

Carlos Carballal añade que no le tembló el pulso para sacar a los más jóvenes al terreno de juego: “Llevábamos años que no se apostaba por la cantera y este año han debutado un montón”. Y suma con cierta retranca: “Lo vemos con la diferencia de los anteriores. Mira Yeremay, con la falta que nos hacía y estaba sin jugar. Al final, resultó que era bueno”.

El presidente de la peña A Torcida da Cabaña cree que el futuro debe pasar por ahí: “Tenemos una hornada muy buena del Fabril, viene el juvenil también. Hemos sido campeones de todo y habrá que apostar por esa gente, ¿no?”

“Veníamos de otros entrenadores que, con sus declaraciones, cada vez que hablaban parecía que echaban más leña al fuego"

Carlos Carballal

— Peña 'A Torcida da Cabaña'

“El que ha apostado realmente por la cantera ha sido él. Antes había jugadores que podían estar en el primer equipo, pero no pintaban excesivamente nada. Salían en minutos que no iban a contar y ahora han demostrado que han jugado partidos completos y han sido parte fundamental de estar donde estamos. Eso provoca que la conexión sea total”, comenta José González sobre un tema que le parece troncal como el filial.

De cara al futuro, los tres peñistas coinciden en que Imanol Idiakez, que es la cabeza visible del proyecto junto a Lucas Pérez, debe ser el comandante de la naviera en Segunda y contar con tiempo y paciencia a largo plazo. El ascenso “no debe ser una obsesión”, insiste Jorge Fernández, que cree que “se lo ganó de sobra, aunque visto cómo funciona el club, puede pasar cualquier cosa”. El de la Peña Verín pide “no obsesionarse” con subir y aprovechar lo que hay: “Por fin tenemos una base de equipo y de gente que siente el escudo. También tenemos esa oleada de chicos jóvenes. En ellos hay que basar el equipo. Los Mella, Yeremay, Villares, Kevin, Rubén… Hay mucha base en la que trabajar. Hay que seguir contando con estos chicos que, al final, son los que nos han sacado de ahí”. Y, concluye, “y Lucas, que ha hecho una temporada tremenda”.

"Apostó por juntar a Mella y Yeremay, otros no los pusieron e Idiakez luchó porque estuvieran juntos”

Jorge Fernández

— Peña Verín

Carlos Carballal no duda en que el futuro pasa por Idiakez: “Si le dan mimbres, hará un cesto bueno”. José González, desde Granada, culmina con una visión similar: “Evidentemente se merece que le den la oportunidad a largo plazo y que no a la primera de cambio empiecen los nervios y quieran descabezarlo”.