El ERE de SolarProfit al 90% de su plantilla en España provoca el cierre de su sede en Arteixo

La firma catalana SolarProfit, especializada en la instalación de placas de autoconsumo fotovoltaico en empresas y hogares, ha cerrado el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que anunció en mayo con el despido de 361 trabajadores, el 90% de su plantilla en España, por lo que solo quedan 41. Esta medida ha provocado que la sede que tiene en Arteixo, en la que llegaron a trabajar medio centenar de personas, cese su actividad. Ahora, los últimos empleados, según explican, están a la espera del pago de las indemnizaciones y algunos, de “las nóminas de mayo”.

El grupo barcelonés anunció el pasado mes de septiembre la presentación de un ERE que afectó al 28% de su plantilla, que estaba formada por 919 personas, de las que medio centenar estaban en la delegación de Arteixo. Al final, salieron de la sede coruñesa una decena de empleados, unos 275 a nivel nacional, y en los siguientes meses 200 más con bajas voluntarias o despidos. Ahora, contaba con 400 trabajadores en toda España, de los que una veintena quedaban en Arteixo.

En mayo, la compañía volvió a anunciar un nuevo ERE, este aún mayor, ya que afectaría al 90% de su plantilla. Ayer, comunicó que ha finalizado con un balance de 361 despidos, lo que supone que quedarán 41 personas. Ninguna de ellas en Arteixo. Estas últimas se quejan de que no van a recibir ni los 20 días por año trabajado de indemnización, por lo que, junto con los sindicatos, han presentado una demanda colectiva por la improcedencia del ERE.

Cuando anunció el primer expediente, la firma ya aseguró que buscaba una reducción de los costes con la redistribución de las zonas correspondientes a cada una de las delegaciones y la racionalización del número de centros logísticos y oficinas. Poseía doce centros de trabajo en Barcelona (donde está su sede), Girona, Tarragona, Vizcaya, Madrid, Toledo, Sevilla, Málaga, Valencia, Murcia, Mallorca y Arteixo.

La empresa ha reconocido que debía implementar “imperativamente” el ERE para garantizar su continuidad y ha atribuido su situación a la ralentización de la demanda por parte de los hogares y del sector industrial y a una bajada de precios por el aumento de la competencia.

El grupo explicó en un comunicado a BME Growth, donde cotiza, que “debido a elevadas tensiones de liquidez que afectan seriamente al cumplimiento de los plazos de pago”, a finales de marzo informó de la apertura de negociaciones con los acreedores para alcanzar un plan de reestructuración. Días después de comunicar el ERE para el 90% de su plantilla en mayo, anunció la presentación de un preconcurso de acreedores.

La compañía de placas e instalaciones solares ha asegurado que en estos momentos está negociando con un potencial inversor. Estas negociaciones, “valorando un posible acuerdo que permita la continuidad del negocio”, llevó a SolarProfit a solicitar una prórroga de tres meses adicionales —los tres primeros habían finalizado el 28 de junio— en las negociaciones con los acreedores, que fue aceptada por el 65% de los acreedores y por el juzgado competente.

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