Raquel Arias | Guionista

“Lo más difícil de escribir ‘Espontáneas’ fue quitarme el filtro del tiempo”

“Fue muy interesante explorar la sexualidad extraconyugal que existía en la época”

La guionista nacida en Vigo Raquel Arias.

La guionista nacida en Vigo Raquel Arias. / .

m. gonzález

Gloria, Brígida, Manuela y Flora son cuatro mujeres de mediados del siglo XIX que comparten la misma situación: se quedaron embarazadas estando solteras. Entonces, las autoridades municipales las citan para nombrar un tutor que las proteja y que vele por su futuro y el de sus hijos ante una sociedad que no las veía con buenos ojos. En el juicio, cada una de ellas es obligada a contar desde cuándo están embarazadas, quiénes son los padres de las criaturas y por qué tuvieron relaciones sexuales sin estar casadas.

La productora Intereuropa TV acaba de finalizar la grabación del teaser (avance) de Espontáneas, una serie que cuenta con la subvención al desarrollo de la Axencia Galega das Industrias Culturais, la Xunta de Galicia y el Instituto da Cinematografía e das Artes Audiovisuais. Se trata de un proyecto de la guionista afincada en Brión Raquel Arias (Vigo, 1989), que ya ha participado en series como Motel Valkirias o O sabor das margaridas y en la comedia

Ghuasapp, que emite la Televisión de Galicia. El teaser cuenta también con la participación de Lidia Veiga, actriz conocida por películas como Matria.¿Cómo surge la idea de este guion?

Surge del grupo de WhatsApp de la familia, donde mi cuñada Mónica manda un mensaje de una noticia de las Espontáneas, la leo y me parece fascinante. A partir de ahí, empiezo a investigar un poco sobre quiénes eran y empiezo a hacerme mil preguntas.

Porque estamos hablando de una historia que está basada en hechos reales, que ocurrieron en Galicia en 1852.

El guion está inspirado en hechos reales, pero los personajes de la serie son inventados. De todos modos, existieron en la época muchas mujeres como ellas a las que les pasó cosas muy parecidas. Sí que hay expedientes que documentan las historias de mujeres reales que fueron Espontáneas.

¿Qué fue lo que le pareció más interesante de estas historias para llevarlas a una serie?

Para mí lo más interesante fue explorar la sexualidad extraconyugal que existía en esa época, desde un punto de vista femenino claro. Para las mujeres, el sexo estaba reservado para, cuando te casabas, tener hijos. Sin embargo, al leer los expedientes, cuando las interrogaban, muchas de ellas contestaban que habían mantenido relaciones fuera del matrimonio por deseo carnal, porque les apetecía y lo habían hecho. Hay mil historias más, como promesas de matrimonio, porque fueron violadas..., pero lo que me interesaba era que en un mundo en el que lo tenían todo prohibido, parece que había más libertad de la que nosotros pensábamos.

¿Eran habituales las madres solteras por aquel entonces?

Galicia tenía la mayor tasa de ilegitimidad de España. Es curioso que, en ese contexto, nace este recurso jurídico que parece que las protege, aunque realmente, visto desde el siglo XXI, creo que era más un tema de control municipal que de protección. Es muy interesante esa dualidad de que son libres, tienen sexo fuera del matrimonio, pero vamos a controlarlas y a ponerle un tutor a sus hijos porque ellas solas no pueden. Esa doble lectura es lo que me fascina a mí.

¿Por qué Espontáneas?

Es el nombre que le pusieron ellos. No he encontrado documentación que explique por qué les llamaban así; pero, si lo piensas, etimológicamente es algo así como que “no queremos saber muy bien de dónde salen”.

¿Qué fue lo más difícil de plasmar estas historias en un guion?

Lo que más me costó fue no contar la historia desde los ojos de hoy. Quitarme el filtro del tiempo, intentar contarlo desde el momento en el que sucedía. Luego, las historias son muy extrapolables al siglo XXI, son historias universales, el reto era contarlas sin colarme con el filtro del tiempo.

Finalizado el rodaje del teaser. ¿Cuál es el recorrido del proyecto?

Mi deseo más profundo es que esto se ruede. El audiovisual es complicado y levantar un proyecto es cada vez más complicado, pero lo ideal sería hacerlo y que triunfase.

¿Hay más opciones con las plataformas?

Es una de cal y otra de arena. Hay mucha demanda por parte de las plataformas y de las cadenas, pero también hay muchísima oferta. Hay muchísima gente escribiendo historias fantásticas, muchísimo talento y, al final, levantar un proyecto de estas características es arriesgar mucho dinero. La cosa tiene que estar muy clara; es difícil en ese sentido, pero no es imposible.

¿Cómo ve el audiovisual gallego?

Hay mucho músculo en el audiovisual gallego y muy buenos profesionales en cada departamento, se está viendo reflejado en las producciones que estamos haciendo.

Suscríbete para seguir leyendo