Cristina Pedroche y sus miedos

La presentadora madrileña publica su primer libro, ‘Gracias al miedo’ (Planeta), un retrato de la parte más oscura de la maternidad y el posparto construidos a través de las circunstancias que ha experimentado tras el nacimiento de su hija Laia

Alba Giraldo

“¿Has vivido eso de estar en el mejor momento de tu vida sintiéndote, al mismo tiempo, tan mal?”, expone Cristina Pedroche (Madrid, 1988) en su primer libro, Gracias al miedo, un retrato de la parte más oscura de la maternidad y el posparto tras el nacimiento de su hija Laia, de 11 meses. Esta contradicción constante y muchas veces incomprendida es a la que se enfrenta desde que dio a luz. “Lo más complicado ha sido llorar sin saber por qué, sentirme perdida, arrollada, con muchísimos miedos que me hacían quedarme en shock “, confiesa.

Un proceso que todavía atraviesa. “Ojalá pudiera decir que ya me he recuperado del posparto psicológico malo”, asegura la esposa del chef Daviz Muñoz. “Ahora estoy mejor. Pero sigo teniendo días en los que todo lo veo en gris oscuro, casi negro, y sigo llorando bastante”. La presentadora reconoce que es una “privilegiada” por las facilidades que tiene en la vida y no se mete presión para volver a encontrarse bien. “Las mujeres necesitamos más tiempo para recuperarnos de este proceso. Me estoy entendiendo más y validando mis sentimientos con toda la calma y la paciencia que necesito ahora mismo”, señala.

Miedo “a no estar a la altura”

El libro nació después de que su ginecóloga le recomendara que apuntara sus pensamientos. Después de darle forma a esas notas, se armó de fuerza para publicarlo. “La escritura me ha enseñado que soy valiente, que los miedos no me paralizan”, asegura. “Me viene bien contar las cosas que me pasan y mucha gente se siente identificada. Eso va a compensar todas las críticas que recibiré”, dice, convencida de que las habrá (y así ha sido). No es un libro de autoayuda: “Yo cuento lo que a mí me ha ayudado y me ha ido pasando para que las personas que lo vivan no se sientan solas, para superar esos miedos que me han hecho sentirme inferior. Las mujeres tendemos a sentirnos malas madres porque toda la responsabilidad recae sobre nuestros hombros”.

“Tengo miedo a no estar a la altura de mis propias expectativas y de la madre que quiero ser. Miedo a no poder con todo”, añade Pedroche en el libro. El miedo también puede ser un motor para avanzar, tomar decisiones y formarse. Por eso decidió aprender todo lo necesario para afrontar el embarazo y el parto: “Esos miedos me han llevado a prácticamente ser matrona. He terminado el curso de educadora prenatal con parto positivo con hipnoparto y estoy haciendo el de posparto”, confirma.

Uno de sus mayores temores era precisamente el momento del parto, por lo que decidió prepararse al máximo. “Es una mierda que nos metan ese miedo cuando todas las mujeres sabemos parir y todos los bebés saben nacer”, asegura. Decidió enfrentarse al parto sin epidural y llegó a disfrutar del dolor. “Ahora no es que pariera todos los días pero una vez al mes la verdad que me encantaría”, asegura.

Precisamente por sus afirmaciones sobre el parto y la labor de los sanitarios ha recibido esas críticas que sabía que llegarían. Está acostumbrada a ellas, pero no a que se hable de su vida privada. Por eso ha decidido no enseñar a su hija en las redes sociales, “ni una manita”, asegura. Lo que sí seguirá mostrando son las dificultades con las que se encuentra en su posparto. “No creo que las redes solo muestren embarazos, partos y pospartos idílicos y maravillosos, cada vez se va mostrando más la realidad. Pero también hay gente que le sale todo bien y eso también es real”, reflexiona. “Vivimos en una sociedad supermachista, que nos juzga. Deberíamos apoyarnos. Cada una lo hace de la mejor manera que puede”, concluye Pedroche.